Prueba y Vete




Prueba y vete nace de "Touch and Go"
Toco y me voy. De manera más sugerente o más atrevida esta expresión se utiliza en infinidad de momentos. Para este blog le damos el significado de probar las cosas al menos por una vez. Para saber como huelen, como te hacen sentir, como nos pierden o nos son indiferentes. Aquí, en este blog prueba la moda, la poesía, la belleza, el arte, los rincones de lugares mágicos….Todo, aunque sea por una sóla vez.
Prueba y vete. O quédate…..Tú decides.

Probando…..Hacerse "MAYOR"



Hace tiempo que no escribo en este "midiario" donde expongo mis pensamientos, vivencias, emociones, retos...

Me he lanzado de nuevo hoy después de leer un post vía Guadalupe Lancho, actriz donde las haya y amiga, de Laura Domínguez, actriz a la que no conozco pero ya admiro.

La semana pasada, me acerqué a Madrid por trabajo (ahora estoy instalada en Ibiza unos meses), y a pesar de las excasas 48 horas que tuve para encajar el puzzle de tareas, una de las que tenía era acercarme directamente a dos Agencias de Representación de Actores.
Así, con toda mi cara, en la puerta.

Ya les había mandado mi material unos días antes. De una recibí una contestación automática impersonal y de la otra ni eso.
Aún así, me lancé a encajar esas dos metas en mi mañana, mientras iba haciendo recados. Estaba sin pretensiones, pero muy positiva y enérgica. Y sin ganas de aparentar nada, vestida muy yo y con un maquillaje de cara lavada.
Venga Diana, tu puedes!!

Me vine arriba y subí con respeto el ascensor hasta la 4ta planta. Llamé y me abrió la puerta una chica joven. Pero me la abrió como cuando llamas a la vecina del 3ro del edificio de tu abuela, que no espera a nadie y además no confía en tu presencia. Cosa que me alarmó y me puso el primer, y no último, nudo en el estómago.
Después de la típica frase de por qué estoy ahí, que ya todos sabréis….viene la respuesta también típica.   "Uy, lo siento, tenemos la cartera de actores llena. De momento no cogemos a nadie. Si quieres mandanos tu material y lo miramos para un futuro". Esa frase hacia un futuro me ha comido 10/12 años de vida...en fin…

Me voy, con una despedida de hilo de voz que ni yo misma intuía ni reconocía y bajaba las escaleras con la cabeza medio gacha. No me merecía coger de nuevo el ascensor. Demasiado cruel y fácil.

Aún así, sin perder la sonrisa, todavía me quedaba media, y de ladillo, me dispuse a caminar hacia el segundo reto. Otra agencia, donde iba con más pretensiones porque me la habían recomendado, buscaban gente y tenía como cierto presentimiento. (La próxima vez que alguien me recuerde que no sirvo para presentir). ;)
Al buscar el número escuchaba a un hombre asomado al balcón hablando por teléfono. Era una conversación de fondo mientras me concentraba en mi memoria a corto plazo para portales y pisos. Al buscar el piso en el telefonillo me doy cuenta que coincide con el hombre que habla desde el balcón. Aún por las dudas, llamo.
...
No me abren y vuelvo a insistir.
Escucho como el hombre del balcón dice un "espera" y acto seguido aparece su voz por el telefonillo. Vaya, es el mismo….gggrrr
Me contesta con la misma energía fuerte y cansada que tenía en su charla telefónica. ¿Por qué tengo que cargar con esto? (Me da tiempo a pensar)...
Le comento la frase que ya todos conocéis y me contesta que si tengo cita. Que sin cita no me pueden ver.

Acabo de hundirme en un hueco bajo mis pies y se me ha cortado el hilo de voz que me dejó la otra chica de la puerta a medio abrir.
Ehhhh, vale…

No puedo decir nada más mientras me cabreo con mi voz y mi mente por no ponerse desacuerdo y hablar a la vez…

Si se hubiesen aliado habrían dicho: Cita? ok, pero si yo estoy aquí abajo y usted ahí a arriba, ¿no puedo subir un minuto y conocernos?.
Respirarnos, olernos. Sentir que puedo ser representada o que ustedes son en los que puedo confiar. Sí, ok, una cita, un mail, una charla telefónica. Pero yo necesito el mismo aire entre nosotros. Un sexto sentido para que me déis la mano y yo os la coja. Si hay feeling, si nuestras miradas se entienden. Esto es como una puta relación de amor pero sin follar. Yo me dejo el alma para meterme en personajes que vosotros habéis buscado para mí contra viento y marea.


Saliendo del hueco donde mis pies se habían ahogado de esta segunda decepción del día, camino lentamente alejándome del portal. Y como si estuviésemos en un rodaje, contando mis pasos y sabiendo donde y cuando me tengo que girar, lo hice. Me paré, gire mi cabeza por el hombro inquierdo para no dar la espalda a cámara y miré hacia el balcón. Y ahí estaba él, el de la cita. El que aún no me ha citado y el que seguramente no me citará. Estaba estupefacto mirándome. Yo le sostuve la mirada 2, 3 segundos y seguí caminando girando la esquina con ocho nudos más en el estómago, y esa angustía que le siguen lagrimones de cuando algo te supera.
No entendía nada.
Respiré, con ganas de insultar. 
Me paré y escribí un mail muy educadamente para pedir…CITA.


Tengo 36. No sé si los aparento o no. Pero mi piel y mis vivencias te lo dicen. No estoy retocada, ni operada, ni suelo salir con tacón a la calle.
Aún así puedes darte la vuelta por la calle si me lo propongo. No es altivez, es realidad. Debemos ser reales. Pero tampoco es imprescindible llamar la atención. Soy de las que prefiere encontrar el atractivo en una segunda mirada que en el primer vistazo.


Afortunadamente nunca me ha faltado trabajo. En mayor o menor medida no he parado desde los 19 años. Y estoy feliz de mi larga trayectoria y de seguir haciendo ruido.
Pero...

Mundo representante??

En los 800 cursos de directores de casting que he hecho, algunos te dicen que es imprescindible que lo tengas, y otros que primero debes hacer algo para que que ellos se interesen por tí.
Estaría genial si se pusieran de acuerdo entre ellos.
De nuevo...en fin.

En el post de la mencionada Laura Dominguez, que por lo visto tiene 40 años. Dice que la frase ligada al número 4 es " Estás en una edad complicada".

Me hace gracia ya que con 25 porque no tienes 20, con 30 porque hay muchas de 30 y no los aparentas. Y con 35 hay como una especie de mirada de reojillo por lo mucho que has trabajado, lo poco que te conocen, y porque no das de 28 pero tampoco tienes pinta de madre.
Así que si con 40 me van a decir que mi edad es complicada, voy a seguir encima de los escenarios bailando, actuando con mis personajes cabareteros y haciendo lo que mi sangre geminiana me da, a ver si con 50 puedo hacer de madre. Aunque seguramente me dirán que me quieren de abuela pero que me faltan algunas arrugas más. O que para madre lo que me faltan son algunos retoques.

En fin...por partida triple.

Pienso que todos tenemos un lugar. Así que aunque en ficción o cine no abran la puerta, ya me busco yo la puerta para hacerla giratoria 24hs al día.

Con la toalla bien agarrada en la mano...

Yo, la de 36.

Con Amor,

Diana.





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