Como bien es sabido por los que me leéis y conocéis, mi pasión por los domingos de Rastro viene desde que tengo uso de razón.
A pesar de haberme criado los inviernos en Valladolid... más de un domingo nos escapábamos a la capital para echar un vistazo en las tiendas de antigüedades más recónditas y regatear por las callejuelas.
Recuerdo que con una de las propinas de navidad de mi padrino me compré algún que otro mueble. Tengo un pupitre de madera maciza donde estudiaba tan agustito, y un armario con una cómoda a juego que te hacía viajar a un mundo de princesas.
Cuando recuerdo todas esas vivencias no me descuadra tanto que desde hace dos años esté metida con mi pareja en el tema reformas y decoración. Al final todo está ahí dentro, todo con lo que te han alimentado. Y tarde o temprano, a su debido tiempo coge forma y sale a la luz.
Por suerte para mi, la vena artística me la inyectaron ya antes de nacer. Mis padres tienen una casa antigua llenita hasta el último rincón de muebles que hacen historia, cuadros de mi padre y millones de fotos de cuando éramos pequeños, que era cuando mi padre no se separaba de la cámara. Y mi madre podía y puede pasarse horas decorando y redecorando cualquier rincón de la casa.
Criarse de esa manera, entre diapositivas, moda y decoración es lo que ha hecho que ahora tenga mil caminos abiertos y esta vida locamente inestable que me da mi propia estabilidad.
De lo que se come se cría. Y yo me lo zampé todo. Ahora voy "escupiendo" su propio alimento transformado desde mi mirada. Quizá más moderna y minimalista. Pero con el sello de la mezcla, que es lo que hace todo más especial.
Y de nuevo gracias a la vida, porque con quién comparto mis días desde hace más de 5 años está hecho del mismo molde. Le apasiona el arte en todas sus variantes, y no nos saltamos un domingo de rastro ni borrachos. Vamos acumulando piezas en casa, y luego les damos vida en nuestros " Clandestinos".
En uno de estos domingos, hace ya casi 2 años...descubrimos un espacio alucinante.
En una de las esquinas de la calle Mira del Río Baja, exactamente en el número 14, se abrió una tienda de muebles antiguos exquisita. Donde su espacio los acoge a la perfección. Techos altos, columnas de hierro, ventanas al más estilo industrial y un aire neoyorquino que parece que estás en el mismísimo barrio de Williamsburg.
Entrábamos bastante a ojear las novedades y ver qué nos podíamos llevar a nuestra cueva de "muebles en reserva hasta próximo destino".
Este año, a nuestra vuelta de la isla, volvimos a pasar y vimos como habían aprovechado la otra mitad de la tienda, que la tenían dividida como almacén.
Así se ha convertido en un espacio amplio y acogedor donde también han aprovechado para compartir algún que otro rincón con artistas con diferentes piezas.
Desde FIUFIUUS, línea de moda basada en originales kimonos japoneses realizados en seda. Colores especiales y estudiados, cada uno diferente llevando a la vida actual un corte que hace historia.
Ig: +FiuFiuus
También comparten MARÍA TORNÉ con su Cerámica Creativa y joyería en Plata, hechas a mano en su propio taller de Malasaña. Originales, exquisitas, coloristas y únicas. No la pierdas de vista que está abriendo fronteras.
@maria_torne
Y como último rincón compartido lleno de luz, está LUISA ALVAREZ, con sus luces de Neon, haciendo de la luz un arte imprescindible para tu casa, dándole un toque diferente tanto en forma como en color. Sin perder la calidez que necesite tu hogar. Puedes encargar tu propio diseño y llevarte una pieza que no dejará indiferente a nadie.
@luisavalvarez
Con todo este cúmulo de experiencias en un mismo espacio, Juan y yo adquirimos dos piezas preciosas que pronto pondré en el post de Clandestino III.
De esta manera, con la compra estuvimos en contacto con la dueña y creadora de este mágico espacio.
FLOR
Esta morenaza, de cuerpo menudo y un look dando vida al nombre de la tienda. Con carácter y personalidad, no podía llevar mejor un lugar para soñar con rincones perfectamente estudiados.
Sólo faltaría un "luces y acción" para rodar diferentes escenas de esta película que es su propio sueño.
"Old School"
...como ella misma se siente. Y como vive y disfruta con fuerza y tesón cada cambio en la decoración. Cree y sabe lo que hace. Ingredientes perfectos para un éxito diario de una emprendedora sin límites.
Y con suerte, he podido disfrutar de dos domingos con DiPinCa en uno de sus rincones...
GRACIAS por dejarme vivirlo...
Os dejo unas fotitos del espacio y de quién lo comparte...
Con Amor,
Diana.
Vídeo de "Old School Rastro"
https://www.youtube.com/watch?v=XD7LtlzgkWs
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Ig: @oldschoolrastro